El cáncer de piel es la forma más común de cáncer en todo el mundo. Los dos tipos más frecuentes son el carcinoma basocelular y el carcinoma espinocelular. Aunque menos peligrosos que el melanoma, estos cánceres pueden causar daño significativo si no se tratan adecuadamente.
Carcinoma Basocelular: Es el tipo más común y crece lentamente. Aunque rara vez se disemina, puede dañar los tejidos cercanos.
Carcinoma Espinocelular: Este tipo de cáncer se desarrolla más rápidamente y tiene una mayor probabilidad de diseminarse, lo que hace crucial su tratamiento temprano.Ambos tipos de cáncer de piel son altamente tratables si se detectan a tiempo. Es esencial realizar un autoexamen de la piel regularmente y consultar con un dermatólogo para cualquier cambio en la piel.